Resumen de la Declaración sobre Migración Presentada en las Naciones Unidas en 2015

En 2013, a escala mundial, había 232 millones de migrantes internacionales, y muchos más migrantes internos, en su propio país de origen. Este movimiento de la gente ocurre a una escala tan significativa que debe ser entendido como una de las características propias que definen esta época.

Las Congregaciones de San José están preocupadas por las prácticas y políticas estatales que debilitan los derechos de los migrantes en los países donde vivimos y trabajamos, sobre todo la detención de personas, las interpretaciones minimalistas de los derechos de refugiados y de las obligaciones gubernamentales, la explotación de trabajadores migratorios y actitudes negativas y prejuiciadas hacia grupos de migrantes.

Las personas deben tener el derecho de migrar en busca de la seguridad personal y libertades básicas, tener un trabajo que les ofrezca un mínimo vital para ellos y sus familias, y las condiciones de vida que son parte de la dignidad de la persona humana. Pedimos la globalización de la solidaridad a través de políticas gubernamentales que aseguren la comprensiva protección para los derechos de todos los migrantes.

En particular buscamos políticas gubernamentales que:

  • Terminen con la detención injusta de migrantes.
  • Creen ciudades de solidaridad (dando a las personas, independientemente de su estado migratorio, acceso a servicios básicos).
  • Creen caminos claros para procesos que lleven a residencias permanentes de los migrantes.
  • Elaboren políticas sensibles a cuestiones de género, de edad y discapacidad.
  • Mejoren actitudes públicas hacia los migrantes.

La declaración en espagnol